No es frustrante que cada persona te da consejos diferentes sobre tu negocio? Estabas emocionado con esta nueva empresa, pero ahora estás confundido. Seamos sinceros. No todos esos consejos son buenos. Estos son algunos ejemplos de consejos que puede que no desees seguir.
Qué hacer con tu trabajo actual
Esto no es algo que otra persona pueda decidir por ti. Montar tu nuevo negocio sin estar atado a otro trabajo puede ser emocionante pero arriesgado. Mantener tu trabajo actual puede hacer que te sientas más seguro, pero te distancia de tu compromiso con tu nuevo negocio. Solo porque tu tío Billy tuvo gran éxito después de dejar su trabajo no significa que él sabe lo que es mejor para ti y tu carrera. Así que piensa bien lo que vas a hacer, y no dejes que otras personas te digan lo que es mejor.
Asesoramiento sobre el mercado
Lo más probable es que nadie ha estudiado el mercado al que intentas entrar más que tú. Esto no detiene a otros de decirte si tu empresa va a ser exitosa. Busca en el mercado tú mismo y decide lo que puedes ofrecer para destacarte dentro de la multitud.
Quién debe hacer el trabajo
Puede que algunas personas te digan que si deseas que tu nuevo negocio tenga éxito, tendrás que hacerlo todo tú mismo. Sencillamente, eso no es cierto. Mientras que la delegación de tareas es algo que tienes que pensar, saber delegar es la clave para tu negocio. Sin embargo, sólo tú puedes decidir cuán envuelto o no necesitas estar.
Dónde anunciarse
Tu prima Juliana puede estar eufórica sobre cómo despegó su salón de manicura en Pinterest, pero eso no significa que ese sea el lugar adecuado para tu nuevo negocio. Tu audiencia podría ser de hombres empresarios principalmente. Esto significa que puedes tratar LinkedIn en vez de Pinterest. No dejes que otras personas te digan dónde está tu público. Haz tu investigación y también algunas pruebas. No tengas miedo de salirte si una determinada red no te está funcionando.
Asesoramiento acerca de tus precios
Las personas podrían decirte que bajes tus precios para atraer más clientes, pero pueden no estar conscientes de tus costos operacionales, o de la labor que tu empresa requiere. Llega a un precio justo por el valor que estás ofreciendo, y uno con el que tu negocio pueda sobrevivir. Solo tú puedes encontrar ese punto medio.
Por supuesto, las otras personas solo tratan de ser útiles, ¡y a veces lo son! Pero no dejes que nadie dicte lo que debes hacer en tu negocio. Solo tú puedes tomar las decisiones grandes e importantes para tu negocio.
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